¿Quién forma parte de mi Tribu?

En consulta, resulta a veces desconcertante cuando pregunto “¿Cuántos sois en tu tribu?, la mayoría de las personas contestan refiriéndose a hijos, padres y abuelos y, tal vez, algún tío o primo que vive cerca y con el que tiene buena relación. Entonces tengo que replantear la pregunta, “¿A quién has elegido para que forme parte de “tu Tribu”?”

La mayoría de las veces las personas hace referencia como “Tribu” a los miembros de la familia consanguínea, pero por suerte, ese concepto es mucho más amplio.

Definiremos “Tribu” como red de apoyo social que brinda apoyo emocional y práctico. Son un recurso valioso para una buena salud mental y bienestar de todos los miembros de la tribu, a nivel individual o colectivo. Cada miembro que pertenece a la tribu tiene derecho a su reconocimiento y respeto como parte del sistema, independientemente de su comportamiento o acciones.

En anteriores artículos hemos hablado de la relación con los hermanos y hermanas, la relación con nuestros hijos e hijas, la relación con nuestros progenitores y la importancia de las redes de madres… alguien me preguntó que dónde había que apuntarse. La realidad es que, en muchos casos, un lazo de sangre no correlaciona una relación de responsabilidad emocional hacia el otro y de cuidado, o, muchas veces, esas figuras no se encuentran debido a diferentes circunstancias.

Por eso me parece importante que cada uno de nosotros seamos capaces de reflexionar sobre cuál es nuestra Tribu. Amigas y amigos que hacen de nuestros hermanos, de tías de nuestros hijos, vecinos que ejercen de abuelos…

Me refiero a la creación de lazos elegidos por afinidad y que surgen de forma natural en el tejido social. Complementan e incluso a veces sustituyen a una familia biológica inexistente o incapaz de proporcionar ese apoyo emocional que necesitamos.

En las relaciones con nuestra Tribu, se experimentará los tres puntos de "Orden del amor" como indica en su teoría Bert Hellinger.

  1. La pertenencia: Todos los miembros de la Tribu tienen el derecho de pertenecer al sistema de la Tribu. La exclusión de cualquier miembro puede generar conflictos y desórdenes en la Tribu.
  2. La jerarquía: Hay un orden natural en las relaciones de la tribu basado en el orden de llegada a la tribu, habilidades, la edad, la experiencia y las características individuales. Mantiene el equilibrio en la Tribu.
  3. El orden entre el dar y el tomar: Un equilibrio saludable entre dar y recibir es esencial para mantener relaciones armoniosas. Desequilibrios en este aspecto pueden llevar a conflictos y resentimientos.

Esta vez solo quiero lanzar una invitación a este sentir, al cuidar de la gente que nos rodea y a dejarnos pertenecer a las Tribus que deseemos sin miedo. Hay que cuidar de la Tribu biológica y de la Tribu elegida y permitirnos pertenecer.

 

*Gracias a mi Tribu biológica y elegida por inspirarme en este artículo. 

 

¿Quién forma parte de mi Tribu?está licenciada bajo CC BY-NC-SA 4.0© 2 por Alicia Nájera Rodríguez 

Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios